martes, 29 de octubre de 2013

¿Cómo conseguir experiencia?

El otro día, en la entrada " Jóvenes y Desempleo" hablábamos del grave problema que supone el desempleo juvenil. No cabe duda de que uno de los grandes obstáculos con los que se encuentran los jóvenes es la inexperiencia. Incluso si están interesados en emprender, para poder desarrollar cualquier proyecto empresarial es fundamental tener, además de unos conocimientos teóricos y un expíritu innovador, una base práctica.

Círculo vicioso


desempleo juvenil



Las empresas requieren un mínimo de experiencia, pero si nadie confía en mí una primera vez, ¿cómo puedo conseguirlo?

Para empezar, no nos centremos en lo que carecemos, sino tengamos en cuenta aquello que puede ser una ventaja. Analicemos los aspectos positivos de nuestro producto (es decir, de nosotros como profesionales). Recordemos lo que hablamos hace unos días en la entrada "Conoce al profesional que llevas dentro" :

"Hacer autoanálisis de forma exhaustiva y, sobre todo, sincera, nos va a permitir saber quiénes somos y hacia dónde podemos dirigirnos."

Puede que no tengamos experiencia laboral, pero es probable que hayamos realizado labores en las que hemos demostrado nuestra profesionalidad, de forma más o menos "sumergida": 


  • clases particulares
  • voluntariado
  • ayuda en un negocio familiar
  • organización de un viaje de estudios
  • publicar un blog... 


Independientemente de que esté más o menos relacionado con el trabajo que estemos buscando, nos permite demostrar y demostrarnos a nosotros mismos (muchas veces somos nuestros críticos más implacables) las capacidades y habilidades que  tenemos. En este sentido os recomiendo leer cómo Sabina Serrano nos aconseja  integrar esas otras experiencias en el CV.

Pero ¿cómo conseguir experiencia laboral en un entorno real? Durante los estudios tenemos la posibilidad de realizar prácticas, bien curriculares, es decir, obligatorias para obtener título o no curriculares, fruto del convenio con empresas o Universidades, en este caso, puede ser también en los cuatro años posteriores a la finalización de los estudios.

Pero también tenemos otras modalidades para cuando ya se ha obtenido el título que habilita para ejercer la actividad profesional.

Prácticas no laborales en empresas para jóvenes titulados

Van dirigidas a jóvenes menores de 26 años con una titulación, universitaria, de formación profesional o certificado de profesionalidad, que carezcan de experiencia en dicha titulación (se entiendo como tal a la que haya sido menor de 3 meses).


Las empresas interesadas en este programa firman un convenio con los Servicios Públicos de Empleo correspondientes de una duración entre 3 y 9 meses y tendrían que abonar una beca de un mínimo de 426 euros (80% del IPREM) más las cotizaciones sociales mínimas y asumen el compromiso de tutorizar al joven con el fin de que acumule la experiencia de la que carece.

En algunas CCAA como, por ejemplo, el Principado de Asturias se subvenciona a dichas empresas por las labores de tutoría, si se comprometen a una contratación laboral posterior al período de prácticas no laborales.

Se trata, por lo tanto, de una alternativa interesante para poder acceder a las empresas.


En este sentido, me gustaría remarcar el interés en que los jóvenes se inscriban como demandantes de empleo y actualicen su titulación en los Servicios de Empleo, porque en función de la información que conste en sus bases de datos, las Oficinas de Empleo realizarán la preselección de los candidatos para enviar a las empresas.


Contratos de trabajo

Otra alternativa de integración en el mercado de trabajo, específicamente dirigida a la obtención de experiencia, esta vez ya hablando de contratos de trabajo, son los contratos en prácticas, modalidad con la que se persigue incentivar a las empresas a contratar a recién titulados mediente reducciones de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social.


Este tipo de relación laboral  va dirigida a quienes hubieren obtenido en los últimos cinco años (o siete en el caso de discapacitados) un título universitario, de formación profesional o certificado de profesionalidad. No podrá tener una duración inferior a 6 meses ni superior a 2 años.

Obviamente podemos aspirar al resto de contratos previstos en la ordenación laboral , pero no es mala idea hacer hincapié, a la hora de presentar nuestra candidatura en las ventajas que puede presentar nuestra contratación, si cumplimos los requisitos para contrarrestar la inexperiencia. Lo importante es no regodearnos en las debilidades, sino resaltar nuestras fortalezas.

En esta artículo hemos partido de una situación en la que tenemos una titulación, pero carecemos de experiencia. Queda para otro día hablar de los recursos que tenemos cuando nuestro punto débil es la formación.

¿Os ha parecido interesante? ¿Cómo compensais el déficit de experiencia? Como siempre vuestras aportaciones serán útiles para todos. 







jueves, 24 de octubre de 2013

NO HABLEMOS DE NúMEROS, SINO DE PERSONAS

Hoy el Instituto Nacional de Estadística ha publicado la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre de 2013, así que he decidido aplazar el artículo que tenía preparado,  porque las frías estadísticas se refieren a personas que están viviendo situaciones complicadas que conjugan sentimientos encontrados de esperanzas, desilusiones, motivaciones, desánimos.

Podría hacer mi propio análisis de los datos publicados o incluir enlaces a opiniones e interpretaciones de diversa índole,  pero me imagino que estaréis hartos. así que....


No quiero hablar de números
No quiero hablar de porcentajes
No quiero hablar de estadísticas
No quiero hablar de análisis
No quiero hablar de gráficas


Quiero hablar de personas

No quiero hablar de brotes verdes
No quiero hablar de reinventarse
No quiero hablar de falsas ilusiones
No quiero hablar de oportunidades
No quiero hablar de talentos


Quiero hablar de realidades


No quiero hablar de emprendedores
No quiero hablar de profesionales
No quiero hablar de éxitos
No quiero hablar de candidatos
No quiero hablar de coaches


Quiero hablar de vosotros

...los que estáis ahí detrás de esta pantalla, buscando en este blog alguna pista que os ayude para enfocar de forma eficaz vuestro trabajo actual: la búsqueda de empleo.


Y quiero hablar con vosotros

porque la mejor forma de poder seros útil es conoceros, así que no dudéis en poneros en contacto a través de las redes sociales o del correo electrónico, o dejando comentarios en el propio blog. Vuestras experiencias serán aportaciones muy valiosas para todos y permitirán que realmente formemos un grupo de Orienta2 al emple0.










martes, 22 de octubre de 2013

Jóvenes y Desempleo

No cabe duda que el desempleo es un problema grave para el conjunto de la población activa, pero afecta en mayor medida a los jóvenes, lo cual es especialmente serio, porque no sólo incide en la situación individual, sino que  supone un freno de cara al futuro económico y social del país.

 La  Organización Internacional del Trabajo (OIT) indica que los jóvenes tienen tres veces más posibilidades que los adultos de estar desempleados.

desempleo juvenil

Fuente OIT: Tendencias mundiales del empleo juvenil 2013: Una generación en peligro

En España el índice de paro juvenil en 2012 es de más del 50%, pero no es un problema específico de nuestro país, tanto es así, que el G-20, es decir, las economías que representan más del 80% de la producción global, declararon prioridad mundial la promoción del empleo entre los jóvenes.

 En el ámbito de la Unión Europea, se establecen medidas para lograr la aplicación de la garantía  de empleo juvenil, que establece que todos los europeos de hasta 25 años deben tener acceso a un trabajo, formación o prácticas en un plazo máximo de cuatro meses  tras terminar  sus estudios o quedar desempleados.

Las medidas concretas adoptadas por España se reflejan en el documento publicado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social: Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven, para el período 2013-2016, en el que se establecen como objetivos:


  • Contribuir a mejorar la empleabilidad de los jóvenes
  • Aumentar la calidad y la estabilidad del empleo joven
  • Promover la igualdad de oportunidades
  • Fomentar el espíritu emprendedor
A lo que hay que añadir las actuaciones que las Comunidades Autónomas toman complementando las medidas estatales, por ejemplo, el Bono de Empleo Joven en Andalucía,  el Plan de Empleo para Jóvenes en el marco del  Acuerdo por el Empleo y el Progreso de Asturias 2013-2015, el Programa Jóvenes para el empleo catalán o el Programa de reactivación del empleo del Sercicio Vasco de Empleo.



 después de tantos datos y de tanta información oficial, podemos deducir que el problema del desempleo juvenil es reconocido por los gobiernos e instituciones, lo que no está tan claro es que las actuaciones que se llevan a cabo supongan una solución definitiva o se limiten a ser parches.

Repasemos las medidas "de choque" que buscan actuar en el corto plazo y que se estructuran en tres áreas fundamentalmente:

Educación

En relación con la formación conviven en la misma generación los jóvenes mejor formados, que corren el peligro de ver desactualizados sus conocimientos al no tener la oportunidad de ponerlos en práctica, con un número relevante de jóvenes con baja cualificación al borde de la exclusión laboral. 

Por ello, las actuaciones han de ir en distintas direcciones, que hoy sólo vamos a dejar esbozadas porque no cabe duda de que la Formación es un tema fundamental que requiere no ya una, sino varias entradas para tratarlo de forma adecuada y útil.

Jóvenes con baja cualificación

  • programas formativos dirigidos a la obtención de certificados de profesionalidad.
  • estímulos para obtener el título de ESO.


Formación Profesional

Está teniendo un gran tirón porque supone una opción formativa con buenas opciones de inserción laboral,  que atrae a personas que se están dando una segunda oportunidad a la formación, incluso después de haber concluido carreras universitarias. En este nivel se busca compatibilizar formación teórica y práctica para ajustarse a las necesidades de la empresa, así se está implantando la Formación Profesional dual que se realiza en régimen de alternancia entre el centro educativo y la empresa.

Universitarios

Después de este grado se busca la especialización a través de máster o cursos de postgrado.


Experiencia laboral

Una vez obtenida una titulación universitaria, de formación profesional o un certificado profesional, se hace necesario favorecer la adquisición de experiencia, a través de estímulos a la contratación. Este es otro tema que requiere ser tratado en profundidad en futuros artículos, ya que los diferentes contratos laborales y los incentivos que pudieran afectarles son de gran interés no sólo para los empresarios, sino para los candidatos que pueden resaltar el valor añadido que su contratación puede suponer.
Cabe mencionar el Programa de Prácticas no laborales para jóvenes titulados con edades comprendidas entre los 18 y 25 años inclusive, con titulación universitaria,de formación profesional o de certificado de profesionalidad, carentes de experiencia laboral u otro tipo de experiencia profesional superior a 3 meses en la misma actividad y que si os parece, para no alargarnos en exceso, le podemos dedicar la entrada del próximo día.

Emprendimiento y Autoempleo

Partiendo de que como reflexionábamos en el post Autoempleo / Emprender el paso inicial debe ser analizar si tenemos la formación, las capacidades y la actitud necesarias, se han ido aprobando diversas medidas para fomentar el espíritu emprendedor. 

Hoy ha salido una entrada más teórica, pero creo que resulta interesante tener sintetizadas las medidas dirigidas a un colectivo específico, y que nos sirva de guión para poder desarrollar futuros posts, siempre teniendo en cuenta las sugerencias que me vayais dando.







jueves, 17 de octubre de 2013

Conoce al profesional que llevas dentro

¿De qué buscas trabajo?





¿Yo?...... De lo que sea


Esta respuesta es muy habitual en un primer acercamiento a un demandante de empleo, y es totalmente lógico dada la presión a la que están sometidas las personas que necesitan encontrar un trabajo.

Pero al no tomarnos un tiempo de reflexión disparamos CVs sin apuntar al objetivo adecuado (ocupación, sector, empresas...), y por lo tanto, errando la puntería.


Como decíamos en la entrada Casilla de Salida,  "es fundamental conocernos a nosotros mismos y nuestras posibilidades para poder realizar una búsqueda de trabajo realista y ajustada a nuestro perfil, así como detectar nuestras carencias para resolverlas en la medida de lo posible". También os emplazaba para desarrollar en profundidad el autoanálisis personal y profesional, así como los test de competencias

Como lo prometido es deuda, y me han llegado vuestros comentarios interesándoos  sobre el tema, vamos a ello.



busqueda de empleo


Debemos interrogarnos sobre tres aspectos fundamentales:


Nuestros intereses  ---> ¿Qué me gusta hacer?

Interesante pregunta, que puede tener una respuesta concreta e inamovible en el caso de aquellos afortunados que tienen una vocación definida y que "sólo" han de establecer una estrategia para conseguir su objetivo. 

Pero para la mayoría de los mortales, no es tan sencillo contestarla.

Y ahí entra la primera parte del autoanálisis:

  •  si tengo una formación o una experiencia a mis espaldas, ¿es lo que quiero seguir haciendo?
  • También puede darse el caso de que tengamos más o menos arrinconada una afición o un hobby que se puede convertir en un objetivo profesional.
  • Y.... ¿si no es así? Pues entonces, habrá que reflexionar sobre qué areas temáticas nos gustan o cuáles son nuestras actividades preferidas: la jardinería, la informática, los viajes, la salud, el trato con el público o las manualidades...



Nuestras habilidades ---> ¿ Cómo hago las cosas?


En este apartado, trataremos de identificar nuestras competencias, es decir, las aptitudes que mostramos relacionadas con comportamientos, métodos de trabajo, relación con los demás…


  • ¿Estamos motivados?
  • ¿Sabemos trabajar en equipo?
  • ¿Somos capaces de relacionarnos con clientes y compañeros?
  • ¿Asumimos responsabilidades?
  • ¿Tomamos decisiones con facilidad?
  • ¿Qué tal andamos en habilidades comerciales?
  • ¿Nos adaptamos fácilmente a los cambios?
  • ¿Tenemos capacidad de aprender?
  • ¿Somos constantes?

Nuestra formación y experiencia ---> ¿Qué sé hacer?

En nuestro C.V. indicamos los estudios que tenemos, los cursos realizados, las empresas y los puestos en los que hemos trabajado, así, de carrerilla, pero, hasta a esos datos que parecen no requerir mayor análisis, les podemos, y debemos, sacar punta.

Yo os recomiendo hacer dos listas, una con la información más laboral, es decir, la que se incluiría en un CV ortodoxo, y otra lista, en la que, en plan tormenta de ideas, vayamos incluyendo los temas sobre los que hayamos ido aprendiendo, aunque fuera de forma autodidacta o informal o en los que hayamos tenido una mínima experiencia alguna vez, no importa que se aparte de la línea profesional que hasta ahora hayamos llevado.


Nuestra empleabilidad ----> ¿De qué forma puedo hacerlo?


En este apartado se trataría de analizar a qué condiciones de trabajo aspiramos y estamos en condiciones de aceptar.

  • Flexibilidad laboral: ¿Qué tipo de contrato, horario, jornada, ubicación del puesto nos interesa?
  • Observación del sector profesional: ¿Cuál es el nivel de desempleo?
  • Bonificaciones: ¿Pertenecemos a algún colectivo con bonificaciones a la contratación?

autoanalisis


Hacer este autoanálisis de forma exhaustiva y, sobre todo, sincera, nos va a permitir saber quiénes somos y hacia dónde podemos dirigirnos.

Esta entrada se complementa con la de hace unos días en la que hablábamos de "Cómo leer una oferta de trabajo", la próxima semana veremos cómo casar ambos análisis. Una vez que somos conscientes de nuestra realidad personal y profesional, vamos a analizar el mercado de trabajo y planificar nuestra estrategia.

Como siempre os digo, estoy a vuestra disposición para cualquier cosa que me queráis comentar y, por supuesto, para tratar los temas que os parezcan interesantes.





martes, 15 de octubre de 2013

Autoempleo / Emprender

La situación del mercado de trabajo es de sobra conocida, y hay muchísimas personas que desempleadas o no, están devanándose los sesos buscando salidas a complicadas situaciones profesionales y, por tanto, vitales.

Una alternativa es lo que con terminología moderna se denomina emprender, vaya, lo que viene siendo, "ponernos por nuestra cuenta"

De esta forma, por un lado creamos nuestro propio puesto de trabajo, el autoempleo, y por otro, si las cosas van bien y ampliamos el negocio, nos convertiremos en empresarios que contratan empleados y a producir y olvidarnos de la crisis.

emprender



Genial, ¿verdad?


Desde todos los medios nos bombardean con las ventajas de emprender, con ejemplos de empresarios que empezaron desde abajo y alcanzaron el éxito, nos hablan profesionales que con el desempleo descubrieron que tenía la oportunidad de ser sus propios jefes.

En este caso, como comentábamos en la reflexión sobre la decisión de trabajar fuerael marketing mediático puede hacernos perder la visión realista y animarnos a riesgos económicos y emocionales mayores de lo que somos capaces de asumir; por otro lado, se traslada subliminalmente un sentimiento de culpabilidad por la presunta pasividad de quien no se decide a dar el paso. 

Como dato, este fin de semana he leído que uno de cuatro autónomos emprende por necesidad; sin entrar en el rigor de este análisis estadístico, creo que es significativo y, nos permite deducir que la imagen del empresario luchando por un proyecto que siempre ha soñado y animado a abordar nuevos retos, no es real en muchos casos. 


autonomos


Sea cual sea el motivo que nos lleve a tomar la decisión, independientemente de que nuestros objetivo sea nuestro propio empleo, trabajando como freelance o como autónomo dependiente, seamos profesionales o artesanos, vendamos on line o con una tienda a pie de calle..., si se hace, hay que hacerlo bien, y para ello es fundamental una definición de los objetivos y una planificación minuciosa que incluya aspectos productivos, económicos, legales, financieros...

Antes de tomar la decisión, hay que partir de la casilla de salida, es decir, del autoanálisis, para saber si tenemos la formación, las capacidades y la actitud necesarias, teniendo claro que si se decide no ser emprendedor, no pasa nada, se puede ser un excelente profesional participando en el proyecto de una empresa. 

Tampoco está mal aprender de la experiencia de los demás. En este sentido me parece interesante la reflexión que hizo hace unos meses Andrés Correa, con un título muy explícito "¿Por qué dejé de ser autónomo? I" y que tuvo una segunda parte "¿Por qué dejé de ser autónomo? II". Os recomiendo su lectura porque de una forma sincera analiza los fallos y también los aciertos que ha tenido.
autonomo


Pocos días después, aparecía en la blogosfera una respuesta titulada "Cómo ser autónomo y no morir en el intento: trece cosas que he aprendido en seis años" en la que se da otro punto de vista, pero también de una forma muy realista y con buenos consejos.


En futuras entradas, iremos profundizando en diferentes temas que os pueden ser ayuda como "emprendedores" actuales o futuros y como siempre os digo, no dudéis en hacerme sugerencias o preguntas que sirvan de ideas para que este blog os sea lo más útil posible.

jueves, 10 de octubre de 2013

Empleo 2.0 ¿Cómo encontrar trabajo por internet?

De toda la vida de Dios hemos podido comprobar la importancia de las relaciones sociales a la hora de encontrar trabajo. Siempre ha sido importante conocer a "alguien":


  • un amigo que nos diga que se prevé una vacante en su empresa,
  • un antiguo jefe que nos dé referencias,
  • un ex-profesor que se acuerde de nosotros, 
  • un cliente agradecido... 


Nunca se sabe dónde puede esconderse una oportunidad laboral, y, obviamente, es recomendable no descuidar esa faceta de nuestra estrategia de búsqueda de empleo.


Empleo 2.0
http://www.rgbstock.com



Actualmente, inmersos como estamos en la globalidad de internet, tenemos acceso a incrementar exponencialmente esas relaciones. A través de las redes sociales las posibilidades de conocer gente, recuperar  contactos perdidos, exponer nuestros valores profesionales... se han multiplicado.

Ahora bien, debemos tener claro que el hecho de aumentar nuestra visibilidad en la web 2.0, no es el fin, sino una herramienta, de gran valor, eso sí, que hemos de saber utilizar para nuestro beneficio y evitar que se convierta en un arma de doble filo.

Desde la experiencia que da el contacto directo con las personas que demandan empleo, yo establecería dos tipologías muy diferenciadas que dejan patente la existencia de una brecha digital.


como encontrar trabajo por internet
http://www.rgbstock.com



- Por un lado, hay un grupo importante de personas que carecen de las habilidades digitales mínimas que se exigen para los pasos más básicos de la búsqueda de empleo: buscar información de ofertas de empleo, enviar un C.V. por correo electrónico, o incluso realizar trámites administrativos en las páginas oficiales de las Administraciones Públicas.

- Por otra parte, el número de usuarios tecnológicos se incrementa día a día, pero no siempre con el planteamiento y los conocimientos adecuados. No es lo mismo tener una cuenta en Facebook, y utilizar Whatshap para compartir comentarios y fotografías con los amigos y familiares, que establecer una estrategia de búsqueda de empleo utilizando las redes sociales.

Una vez establecida la importancia del tema, no cabe duda de la necesidad de ponerse al día, partiendo de la alfabetización digital, pero sin descuidar la necesidad de profundizar en las posibilidades que plantea, y en los riesgos que presenta.

¿Riesgos?

 Efectivamente, tiene unos riesgos nada despreciables. En la sociedad virtual de la que formamos parte se ve una imagen que está basada en el contenido que nosotros publicamos y en las reacciones de quienes se interrelacionan con nosotros. Por lo tanto, debemos ser extremadamente cuidadosos con toda la información que es  susceptible de ser visible, ya que de ella depende cómo vamos a ser calificados por terceros, y si a nivel privado es importante, a nivel profesional es vital. En este sentido, me parece interesante la reflexión de Juan Martínez acerca de si es necesario mantener nuestro perfil social separado del profesional 

Esa imagen que transmitimos ha de ser un reflejo de nuestra personalidad y es lo que en la terminología moderna representa el concepto de marca personal, es decir, aquellas cualidades que nos diferencian y que han de hacernos destacar. Es un tema importante, que, si os parece bien, trataremos de forma más concreta en posteriores entradas.


Marca personal


Profundizando en el tema, esta semana se ha publicado la guía "Rumbo al empleo 2.0" fruto de la colaboración de cinco profesionales de los recursos humanos, y que es una excelente fuente para captar las ideas principales que deben orientar la búsqueda de empleo a través de las redes sociales.




Esta guía está estructurada en tres partes que tratan sobre las redes sociales más habituales:
Y el complemento de dos capítulos, uno sobre la marca personal, realizado por Miguel Angel Riesgo, tema sobre el que he hecho mención en este mismo artículo, y finalmente una referencia a las entrevistas de trabajo por Víctor Candel.

Os recomiendo su lectura porque aporta los conceptos básicos que hay que tener claros para iniciar una estrategia profesional en la web 2.0. 
rumbo al empleo 2.0


Sin ánimo de hacer una reseña de la guía, sí me gustaría destacar que la exposición en los medios sociales provoca que sea necesaria una mayor actividad e iniciativa tanto para quienes buscan empleo, como para quienes lo ofertan.

  • Es de destacar un cambio de actitud por parte de los reclutadores o encargados de la selección de personal, que no sólo pueden limitarse a buscar la información que los candidatos hacen visible a través de las redes  sociales, sino que también han de contar con la exposición en la red de la empresa.
  • La búsqueda de empleo 2.0. requiere un esfuerzo para crear un perfil y actualizarlo, interactuar y utilizar de forma adecuada las diferentas herramientas. Pero no sólo eso, también es de gran utilidad buscar información y mantener listas de empresas, sectores y reclutadores de nuestro interés que podemos utilizar bien para presentar nuestra candidatura, bien a la hora de una entrevista de trabajo.
Me gustaría destacar la idea de que no debemos olvidar la búsqueda 1.0 (o tradicional), sino combinar ambas, sin olvidar cuál es el objetivo, por lo que no conviene centrarse solamente en los preliminares, ya que, al final, llega la desvirtualización, es decir, el proceso de selección, la entrevista de trabajo...

La guía finaliza con la recomendación de no descuidar la red de contactos, la marca personal y la formación cuando se encuentre empleo. ¡Gran consejo!

Un gran trabajo desinteresado, que podéis descargar gratis, en este enlace Rumbo al empleo 2.0

Una vez leído, me gustaría conocer vuestra opinión. Como siempre, tenéis aquí un espacio para compartir vuestras  sugerencias y experiencias. Este blog es flexible y se puede ir adaptando a los temas que más os interesen.

martes, 8 de octubre de 2013

Cómo leer una Oferta de Trabajo

Cuando estamos buscando empleo, leemos y releemos todas las ofertas de trabajo que están a nuestro alcance, intentando encontrar cualquier coincidencia con nuestro perfil para poder enviar el CV y tener una oportunidad más.

Pero, lo importante, no es repartir innumerables copias de nuestro C.V., sino que llegue a las empresas adecuadas, en el momento adecuado y para el puesto adecuado.

¿Cómo conseguirlo?

Para ello, un aspecto crucial es extraer la información relevante de la oferta de trabajo que estamos leyendo.

¿Cuál es la información útil de las ofertas de empleo?

Oferta de trabajo



Este análisis nos resulta interesante por varios motivos:

-          para solicitar ese puesto en concreto
 De esta forma sabremos si esa oferta de empleo es adecuada a nuestro a nuestras perspectivas personales y profesionales y podremos atenderla adecuadamente.
-          para descubrir nuestras carencias 
Si observamos que un determinado requisito se repite en las ofertas a las que aspiramos y no lo cumplimos, es la hora de plantearnos cómo mejorar nuestro perfil profesional en ese sentido, o bien, renunciar a ese tipo de puestos de trabajo y orientar la búsqueda hacia ofertas más ajustadas a nosotros.
-          permite detectar las necesidades de un sector 
La observación de las ofertas de trabajo que aparecen publicadas nos da una visión general de hacia dónde va el mercado de trabajo; con esas pistas podemos determinar qué sectores están estancados y cuáles pueden tener mayores oportunidades de empleo y dirigir hacia allí nuestra trayectoria profesional.

Esta va a ser la primera de una serie de entradas en las que pretendemos analizar toda la información que de una forma más o menos explícita nos proporcionan las ofertas de trabajo, para que, por un lado, nos orientemos a aquellas que son más ajustadas a nuestro perfil e interés, y, por otro, adecuemos nuestros acciones a lo que las empresas contratantes necesitan.

¿Qué otra información os parece relevante? ¿Filtráis las ofertas más adecuadas a vosotros? ¿Procuráis seguir las indicaciones que las empresas dejan reflejadas en las ofertas? ¿Sabéis leer entre líneas?

jueves, 3 de octubre de 2013

Casilla de salida


El primer paso es identificar nuestro objetivo, que aunque a primera vista parece evidente: "encontrar trabajo",  no es tan simple.

OBJETIVO ----> TRABAJO

 No es lo mismo haber perdido un trabajo y enfrentarse a sentimientos derrotistas, que estar buscando un cambio o mejora de empleo. También depende de la urgencia o necesidad que se tenga, ya que una situación económica o familiar delicada puede hacer que tengamos que aplazar un proyecto profesional más apetecible, a cambio de una oportunidad laboral inmediata. Como dice Alfonso Alcántara en  yoriento :  "trabaja en lo que puedas pero no dejes de buscar lo que quieres"

Debemos partir de un análisis de nuestra situación económica, familiar, personal y profesional para dirigir nuestra búsqueda hacia un tipo de trabajo, profesión o sector de actividad determinados. A partir de ahí vamos a poder determinar cuál es nuestro perfil profesional, qué podemos aportar a un empleo y qué competencias deberíamos mejorar.



Es fundamental conocernos a nosotros mismos y nuestras posibilidades para poder realizar una búsqueda de trabajo realista y ajustada a nuestro perfil, así como detectar nuestras carencias para resolverlas en la medida de lo posible.


Como ejemplo, os propongo el siguiente cuestionario para que os sirva de autoanálisis, después de realizarlo, podéis pasárselo a familiares o amigos y comparar los resultados, quizá os llevéis alguna sorpresa al ver vuestras capacidades (y también las debilidades) a través de ojos más objetivos, y es posible que os aporten alguna idea que jamás habrías barajado.




  1.  ¿Cuál es mi formación? 
  2. ¿Qué habilidades he ido desarrollando?
  3. ¿En qué tengo experiencia?
  4. ¿Cuáles son mis actividades preferidas?¿Qué me gusta hacer?
  5. ¿Cuál es mi situación personal y familiar?
  6. ¿En qué destaco?
  7. ¿Qué se me da peor?
  8. ¿Qué tipo de empleo puedo desempeñar?
    • ¿Tengo iniciativa propia o prefiero que me dirijan?
    • ¿Me agrada asumir responsabilidades?
    • ¿Tengo temple frente a los obstáculos o pierdo los nervios?
    • ¿Soy constante en el trabajo o abandono pronto?
    • ¿Me conformo con lo alcanzado o aspiro a más?
  9. ¿Cuál es mi objetivo profesional a corto y a medio plazo?


Dejo planteada la idea de hacer una entrada para tratar en profundidad el autoanálisis personal y profesional, así como los test de competencias. ¿Qué opináis? ¿Sería interesante? ¿Os parecen útiles?¿Habéis realizado alguno? ¿Quedásteis satisfechos con el resultado?

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